La importancia de leer

12/01/2024

Por qué deberíamos leer libros

Participar en la lectura sirve como ejercicio mental, fomenta una sensación de calma y relajación en los niños y, al mismo tiempo, abre las puertas a nuevos conocimientos que iluminan sus mentes. Los beneficios cognitivos de la lectura se extienden más allá de la infancia y tienen un impacto positivo en personas de todas las edades.

La lectura entrena el cerebro

La lectura mejora la memoria ya que los lectores deben retener detalles sobre los personajes, los escenarios y las tramas. Este proceso fortalece la memoria y crea nuevas vías neuronales. En consecuencia, las personas que se dedican a la lectura exhiben un mejor rendimiento académico, con un impacto positivo en las habilidades analíticas y la toma de decisiones.

Ken Pugh, director de investigación de los Laboratorios Haskins de la Universidad de Yale, dice que la lectura activa todas las áreas principales del cerebro, mejorando el lenguaje, la cognición, la imaginación y las habilidades de atención selectiva y sostenida. Los libros que cuentan historias como ficción o no ficción narrativa son particularmente beneficiosos para el entrenamiento cerebral porque promueven el desarrollo de la imaginación y las habilidades cognitivas de una manera que otros géneros no pueden.

La lectura desarrolla habilidades de comunicación

Siempre podemos compartir lo que hemos leído con nuestra familia, amigos y colegas. Todo esto aumenta nuestra capacidad de socializar. Los humanos somos seres sociales y en el mundo de los teléfonos inteligentes estamos perdiendo nuestra capacidad de socializar. Sin embargo, la lectura ha llevado a la formación de clubes de lectura y otros foros donde tenemos la oportunidad de compartir e interactuar con otros.

Un estudio publicado en el Journal of Developmental and Behavioral Pediatrics reveló que si un niño lee solo un libro ilustrado al día, escuchará 78.000 palabras al año. Esto significa que en familias donde se leen muchos libros, un niño en edad preescolar escucha 1,4 millones más de palabras en uso que un niño cuyos padres no les leen. Esto influye significativamente en el desarrollo del vocabulario y el lenguaje del niño.

La lectura te convierte en un mejor líder

Aunque no se ha demostrado definitivamente, casi todos los grandes líderes eran lectores. Una razón por la que son respetados y conocidos por su sabiduría es porque desarrollan hábitos de lectura saludables. Durante siglos, la lectura ha sido fuente de inspiración, crecimiento y nuevas ideas. Es una inversión valiosa en la propia personalidad con beneficios incontables y duraderos. Si desea que su hijo se convierta en uno, debe animarlo a leer. Mantendrá su mente sana y productiva. Sólo así podrán impactar al mundo de una mejor manera.

John Coleman, un experto en gestión, señaló en Harvard Business Review que la lectura contribuye a la inteligencia verbal, mejorando el conocimiento y la elocuencia de un líder en la comunicación. En particular, la lectura de ficción fomenta la empatía, lo que ayuda a comprender y relacionarse mejor con los demás. Al reconocer el papel fundamental que desempeña la inteligencia emocional en las habilidades de liderazgo, Coleman sugiere explorar deliberadamente varios géneros mediante la lectura y la participación en clubes de lectura para descubrir libros que tal vez no se elijan de forma natural.

La lectura te ayuda a conseguir un mejor trabajo

Los niños a los que se anima a leer a una edad temprana comprenden mejor lo que les rodea. Desarrollan habilidades de pensamiento inteligente y son más receptivos a la creatividad y las ideas de las que carecen otros niños de su edad. Como resultado, crecen y se vuelven mucho más inteligentes y conscientes de su entorno que los niños que no leen.

Investigadores de la Universidad de Oxford analizaron los resultados de una encuesta realizada entre 17.200 personas nacidas en la década de 1970 y descubrieron que aquellos que leían libros habitualmente a los 16 años tenían más probabilidades de haber alcanzado una buena posición profesional o de liderazgo a los 33 años. A los participantes en el estudio también se les hicieron preguntas sobre otros pasatiempos como los deportes, asistir a eventos culturales, jugar juegos de computadora, coser y cocinar. Se reveló que ninguna otra actividad tenía un impacto tan positivo en el desarrollo y la futura carrera de un joven como la lectura.

Referencias