Krakatit

El inventor Prokop descubre una forma de desintegrar cualquier sustancia hasta sus átomos. Al hacerlo, se libera una enorme cantidad de energía en forma de explosión. Crea una sustancia llamada "krakatit", el explosivo más terrible del mundo, que puede ser detonado de forma remota mediante ondas electromagnéticas. Prokop se da cuenta del impacto de su descubrimiento: quien posea el krakatit podría llegar a ser el gobernante del mundo. Otros se dan cuenta de esto y tratan de despojar a Prokop de su invento. El antiguo socio de Prokop, Tomesh, obtiene parte de la fórmula e intenta fabricar el explosivo. Prokop resiste las tentaciones, no revela la fórmula y al final es testigo de la trágica explosión del laboratorio donde Tomesh estaba intentando preparar el explosivo. Al final, Prokop, delirante por la fiebre, se encuentra con un anciano de cuento de hadas: Dios, quien le transmite un mensaje reconciliador sobre la bondad y la necesidad de hacer solo cosas que beneficien a las personas.